Pero siempre he necesitado una motivación, y pueden ser distintas fuentes, lo difícil es encontrar una, mientras el vacío dentro de mí es una bomba de tiempo. Debo evitar hacer algo de lo que me arrepienta.
Me encontré siendo ingenuo, porque por un segundo pensé que estaría bien con tu cariño, como si hubiera tenido 16 años de nuevo. No ha pasado nada malo, y no es como cuando era tan joven y más desesperado por serotonina. Pero no quiero ser la cruz que tengas que llevar, y que será tan dolorosa de dejar atrás, no quiero hacerle eso a nadie más.
Hoy en día ya nada duele demasiado, ni nada es extraordinariamente excitante. Pero me hace feliz el equilibrio de vez en cuando, me da algo de esperanza.
Explotarme en sustancias y experiencias riesgosas ya no es algo que me llame tanto la atención, porque me temo. Pero siempre ha sido mi salida fácil, es difícil tomar las riendas de mi vida cuando siempre tengo poca energía para la rutina.
Ni yo me creo lo optimista que soy, ¿de donde carajo sale? lo que me hace creer porqué todo está bien si al menos una vez a la semana puedo pasar la noche contigo.
En mi vida casi nunca siento paz, todo es rápido y vertiginoso, contigo no me avergüenzo de ser tonto, de no poder pensar bien, de tener el control de mis impulsos. Rara vez me siento tan puro, tan juguetón y tranquilo.
Ojalá no puedas leer esto, ya no me siento mal por ocultar lo que siento y cuánto me gusta estar contigo, ya no tengo la adolescente necesidad de que todes sepan lo que siento. No tengo idea de si las cosas duran o no, en qué condiciones o con quienes.
Sólo se que ahora contigo estoy bien, y soy feliz de haber estado tranquilo al menos un tiempo. Ojalá eso dure, porque ya aprendí a agachar el moño.
¿Seré el único deprimido optimista?
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